FO:LACFC/2000/2





COMISION FORESTAL PARA AMERICA LATINA Y EL CARIBE

Tema 3 del Programa Provisional

VIGESIMO PRIMERA REUNION

Santa Fe de Bogot�, Colombia, 4-8 de septiembre del 2000

SITUACION FORESTAL EN LA REGION DE AMERICA LATINA Y EL CARIBE: Per�odo 1998-1999

Nota de la Secretar�a

INTRODUCCION

1. La Oficina Regional de la FAO para Am�rica Latina y el Caribe organiza cada dos a�os una reuni�n de la Comisi�n Forestal para Am�rica Latina y el Caribe (COFLAC), donde se invita a participar a todos los pa�ses miembros de la FAO en la Regi�n. En la reuni�n se analiza la situaci�n de los bosques de la Regi�n y el estado del sector forestal de los pa�ses participantes, permitiendo evaluar su evoluci�n, y sirve como foro para intercambiar experiencias.

2. Con el fin de obtener la informaci�n necesaria para establecer las bases de las deliberaciones, la Oficina Regional de FAO envi� una pauta a cada pa�s de la Regi�n, solicitando que consigne, en forma actualizada, los aspectos m�s relevantes del sector forestal y los mayores cambios experimentados en el per�odo transcurrido desde la anterior reuni�n de la COFLAC.

3. El presente documento se ha preparado sobre la base de la informaci�n contenida en los informes recibidos hasta la fecha de su preparaci�n y suplementado con informaci�n disponible de otras fuentes. Por esta raz�n esta Nota de la Secretar�a debe considerarse como un documento de trabajo, que debe ser actualizado y ampliado despu�s de la reuni�n, luego de la recepci�n de todos los informes y con los resultados de las deliberaciones.

LOS RECURSOS FORESTALES DE LA REGION

Los bosques naturales

4. De acuerdo a la publicaci�n hecha por FAO (1999) Situaci�n de los Bosques del Mundo, la cubierta forestal de los pa�ses de Am�rica Latina y el Caribe alcanzaba en 1995 a 950 millones de hect�reas. El 91.6% de estos recursos se encuentra en Am�rica del Sur; 7.9% en Am�rica Central y M�xico, y s�lo un 0.5% en el Caribe. En cuanto al tipo de bosques, en la Regi�n predominan los bosques tropicales o subtropicales, con unos 907 millones de hect�reas. El resto corresponde a los bosques templados de Argentina, Chile, M�xico y Uruguay.

5. Los bosques de la Regi�n son muy diversos en cuanto a su composici�n, crecimiento y productividad, debido a las enormes variaciones de clima, suelo y topograf�a presentes en esta vasta regi�n. Esta variabilidad da origen a bosques tropicales de gran diversidad biol�gica, as� como a bosques templados fr�os, con una o dos especies arb�reas. Ejemplos de �sto son los bosques patag�nicos, con una amplia gama de situaciones intermedias, a saber bosques subtropicales, secos y templados lluviosos, entre otros.

6. En el �mbito del manejo de los recursos naturales, la deforestaci�n es uno de los principales problemas que enfrenta la Regi�n. La p�rdida de cubierta forestal entre 1990 y 1995 alcanz� a 29 millones de hect�reas. Las mayores tasas de deforestaci�n, en t�rminos porcentuales, corresponden a la Subregi�n del Caribe. Un an�lisis preliminar de la Evaluaci�n de los Recursos Forestales Mundiales 2000 de la FAO indica que en los �ltimos a�os existe una tendencia a la disminuci�n en la tasa de deforestaci�n en los pa�ses de la Regi�n, marcando un cambio positivo con relaci�n a la d�cada 1980-90, per�odo en que la cifra de deforestaci�n anual alcanz� a 7.68 millones de hect�reas.

7. Una importante causa de la deforestaci�n en algunos pa�ses sigue siendo el avance de la frontera agr�cola y pecuaria. La excepci�n la constituyen los pa�ses del Cono Sur de Am�rica del Sur, donde se est� dando el proceso inverso, es decir, una reconversi�n de tierras de uso agropecuario hacia el uso forestal. En la mayor�a de los pa�ses tropicales de la Regi�n existe una presi�n considerable por tierras para cultivo y es com�n la existencia de agricultura migratoria. Las pol�ticas gubernamentales de colonizaci�n y de promoci�n del crecimiento econ�mico, por lo general no consideran las consecuencias ambientales, constituyendo una de las principales causas de la p�rdida de los bosques naturales.

8. Otra causa importante de degradaci�n de bosques son los incendios forestales, que pueden contribuir en forma decisiva a la deforestaci�n ulterior. Durante 1998, tanto Am�rica del Sur como Am�rica Central y M�xico, se vieron enfrentados a devastadores incendios forestales como consecuencia de la sequ�a causada por la presencia del Fen�meno del Ni�o. En 1998 se reportaron 3.3 millones de hect�reas quemadas en Am�rica Central y M�xico. La mayor�a de los incendios (93% en M�xico) fueron causados por el hombre. El Estado de Roraima, en el norte de Brasil, tambi�n se vio severamente afectado por incendios forestales.

9. La Evaluaci�n de los Recursos Forestales del Mundo para el a�o 2000, que est� siendo realizada por FAO, permitir� poner al d�a las cifras de existencia de bosques en la Regi�n, ya que varios pa�ses han actualizado sus inventarios forestales, y tambi�n permitir� confirmar la aparente tendencia a la disminuci�n en las cifras de deforestaci�n.

10. A�n cuando los principios racionales del manejo forestal han sido conocidos por varias d�cadas, su aplicaci�n a gran escala no es una pr�ctica generalizada. Desarrollos positivos recientes incluyen el manejo sostenible de bosques nativos, aplicando conceptos y pr�cticas desarrollados recientemente. Sin embargo, esta �rea es a�n relativamente peque�a. De acuerdo a estimaciones realizadas en algunos pa�ses, los porcentajes de bosques nativos bajo manejo var�an entre un 5 y un 13%. S�lo algunos pa�ses proveen incentivos para el manejo de los bosques. Varios pa�ses de la Regi�n est�n conduciendo programas piloto, destinados a promover pr�cticas de manejo sostenible de bosques naturales. Entre ellos, cabe mencionar Brasil, Costa Rica, Guyana, Colombia, Chile, Honduras, M�xico, Nicaragua y Venezuela.

11. Algunas tendencias positivas observadas en la Regi�n son: la formulaci�n y aplicaci�n de nuevas pol�ticas y leyes, la participaci�n de los pa�ses en los foros internacionales; el desarrollo de criterios e indicadores para el manejo forestal sostenible para contribuir a las demandas de todos los sectores de la sociedad, muchas veces con una fuerte participaci�n de organizaciones de la sociedad civil. Sin embargo, la implementaci�n de los acuerdos internacionales y la evaluaci�n y monitoreo del manejo forestal sostenible usando criterios e indicadores desarrollados en los distintos procesos internacionales en los cuales participan los pa�ses de la Regi�n son lentos o a�n no se ven reflejados adecuadamente en las pol�ticas o legislaci�n a nivel nacional.

12. Una iniciativa interesante, desarrollada al menos por tres pa�ses, es el establecimiento de "bosques modelo", que tiene como objetivo seguir ensayando y demostrar los beneficios de la aplicaci�n del manejo forestal sostenible, teniendo en cuenta aspectos de protecci�n, productivos y ambientales y una amplia participaci�n de varios grupos de la sociedad.

13. El manejo sostenible de bosques naturales, especialmente bosques tropicales, deber�a ser mejorado gradualmente basado en nueva investigaci�n. Esta situaci�n se contrapone con la precaria capacidad de investigaci�n forestal en los pa�ses de la Regi�n. Los vac�os en la investigaci�n son agravados a�n m�s por la necesidad de reorientar los esfuerzos para enfrentar nuevas demandas relacionadas con la aplicaci�n de criterios e indicadores para el manejo forestal sostenible. M�s a�n, con el cumplimiento de los compromisos internacionales contraidos.

14. En los �ltimos a�os se ha visto un creciente inter�s de las empresas forestales por diversos procesos de certificaci�n forestal. En Chile y Brasil numerosas empresas han logrado la certificaci�n de sus procesos de acuerdo a las normas ISO 14.000. Adem�s, varios pa�ses de la Regi�n han certificado bosques de acuerdo a las normas del Forest Stewardship Council (FSC), entre ellos se destacan Brasil, Bolivia, M�xico y Guatemala. Tambi�n es importante destacar que existen unidades de manejo administradas por comunidades que han logrado esta certificaci�n. Esta situaci�n se ha dado en M�xico, Guatemala, Bolivia, Honduras y Costa Rica.

15. Algunos pa�ses de la Regi�n est�n revisando sus mecanismos de concesiones de bosques naturales (Bolivia, Guatemala), ya que son una fuente importante de manejo inadecuado y en consecuencia, de degradaci�n de los bosques. Asimismo, en varios pa�ses se han iniciado procesos de privatizaci�n, entre los cuales se considera la devoluci�n de tierras ancestrales a comunidades ind�genas (Colombia, Ecuador, Per�) y la creaci�n de reservas comunales y reservas extractivas (Brasil).

Plantaciones forestales

16. Un componente importante de los recursos forestales de la Regi�n son los bosques plantados, que alcanzan una superficie cercana a los 12 millones de hect�reas, lo que representa un poco m�s del 1% de los bosques de la Regi�n. La mayor parte de estos recursos (11 millones de hect�reas) se encuentra en Am�rica del Sur. A�n cuando las plantaciones forestales representan hoy un escaso porcentaje de la cobertura forestal total, cumplen un importante papel en el abastecimiento de las principales industrias forestales de la Regi�n.

17. La mayor�a de los pa�ses han introducido legislaci�n que apoyan mecanismos en sus pol�ticas forestales destinados a fomentar el establecimiento de plantaciones forestales. Los pa�ses m�s exitosos en la aplicaci�n de estos mecanismos han sido Argentina, Brasil, Chile y Uruguay.

18. Brasil se destaca como el principal pa�s con bosques plantados, con una superficie de 6 millones de hect�reas y una tasa de plantaci�n anual, en los �ltimos cinco a�os, cercana a las 130.000 hect�reas. En segundo lugar se encuentra Chile, con una superficie plantada de 2.1 millones de hect�reas y una tasa de plantaci�n anual promedia de 91.000 hect�reas entre 1994 y 1998. Durante los �ltimos dos a�os (1998-1999) se produjo una notable baja en las tasas de forestaci�n en este pa�s, producto de situaciones internas y de condiciones favorables en los pa�ses vecinos (Argentina y Uruguay) que han establecido recientemente importantes programas de incentivo a la forestaci�n. Distinto es el caso de Venezuela, donde el esfuerzo forestador lo sigue haciendo el Estado a trav�s de sus instituciones.

19. La mayor�a de las plantaciones en Am�rica del Sur se han hecho utilizando especies introducidas. Predominan las plantaciones con especies de los g�neros Eucalyptus y Pinus, que han demostrado una gran adaptaci�n a las diversas condiciones presentes en la regi�n. En Am�rica Central y M�xico, en cambio, predominan las plantaciones con especies originarias de la misma Subregi�n, a�n cuando tambi�n se han hecho plantaciones de Eucalyptus.

20. Muchos de los pa�ses con plantaciones de gran escala cuentan con importantes programas de mejoramiento gen�tico, con una importante participaci�n de las empresas forestales. En Brasil y Chile se destacan los programas de mejoramiento de Eucalyptus y Pinus, y en Colombia de Pinus. Otros pa�ses, entre ellos M�xico, han iniciado programas de mejoramiento gen�tico en a�os recientes.

21. Plantaciones forestales, especialmente en �reas subtropicales, son en general altamente productivos comparadas con bosques nativos. Los pa�ses con mayores plantaciones (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Uruguay y Venezuela) han dedicado gran parte de su investigaci�n al establecimiento y manejo de estos tipos de bosques, lo cual ha ido en desmedro de la investigaci�n sobre los bosques nativos.

POLITICA, LEGISLACION Y PLANIFICACION FORESTAL

Procesos de formulaci�n de pol�ticas forestales

22. La mayor�a de los pa�ses de la Regi�n no cuenta con pol�ticas forestales expl�citas, por lo que es necesario deducirlas de las leyes forestales, de conservaci�n y de medio ambiente, y de los programas, planes o proyectos de acci�n forestal de los pa�ses. S�lo 14 pa�ses han formulado pol�ticas forestales expl�citas. Actualmente, producto de los resultados de la discusi�n internacional m�s reciente sobre los bosques (Panel Intergubernamental sobre Bosques-PIB; Foro Inergubernamental sobre Bosques-FIB) se percibe una tendencia positiva en este sentido.

23. A�n cuando la situaci�n es variable, se puede decir que, en general, los pa�ses tienen numerosas pol�ticas, leyes y programas destinadas a regular, orientar y fomentar el uso de los bosques y el desarrollo de actividades forestales, lo cual no siempre se traduce en soluciones a los problemas que afectan a los bosques y al sector forestal. Las fases de ejecuci�n, fiscalizaci�n y monitoreo por lo general presentan deficiencias, restando efectividad a los esfuerzos legislativos y de planificaci�n.

24. La mayor�a de los pa�ses considera la necesidad de dar mayor participaci�n a la sociedad civil en la formulaci�n de las pol�ticas forestales y, por lo general, han establecido alg�n tipo de estructura a nivel gubernamental que permita dicha participaci�n. A pesar de esto, la formulaci�n de las pol�ticas forestales sigue estando muy centralizada en las instituciones gubernamentales, principalmente en los ministerios de agricultura y de medio ambiente. Aun cuando las pol�ticas principalmente emanan de los organismos gubernamentales, existe la tendencia hacia una mayor participaci�n de la sociedad civil, a trav�s de grupos organizados, en la formulaci�n de las pol�ticas. La participaci�n de estos grupos en algunos pa�ses se traduce en opiniones que no necesariamente son consideradas.

25. La tendencia hacia una mayor participaci�n de la sociedad civil en el desarrollo de las pol�ticas forestales, por varias razones, no es garant�a de �xito en la implementaci�n de estas pol�ticas, ni en la consecuci�n de las metas que estas plantean. Sin duda que el factor determinante para el �xito de las pol�ticas forestales es el grado de compromiso pol�tico a nivel gubernamental y una efectiva integraci�n de la pol�tica forestal dentro de un plan de desarrollo econ�mico nacional.

26. Otro problema importante que se identifica en materia de pol�ticas y legislaci�n forestal, es su falta de integraci�n con otros sectores relacionados, tanto a nivel privado como estatal. Esta desvinculaci�n es particularmente importante cuando no se involucra a los Ministerios que manejan los recursos financieros.

Los principales temas de las pol�ticas forestales a nivel nacional

27. El manejo forestal sostenible es, sin duda, el tema que predomina en la discusi�n sobre bosques en la Regi�n. Todos los pa�ses reconocen la necesidad de avanzar hacia la aplicaci�n del manejo sostenible de sus bosques, y que �stos contribuyan al desarrollo nacional y al desarrollo de las comunidades, que en el caso de los pa�ses tropicales de Am�rica Central y Am�rica del Sur, viven en estrecha relaci�n con los bosques. El Programa 21, Los Principios Forestales, los procesos sobre Criterios e Indicadores para el Manejo Sostenible de los Bosques, y los resultados de la discusi�n intergubernamental sobre los bosques, en el seno de las Naciones Unidas (PIB/FIB), son elementos que est�n siendo integrados en forma gradual a los procesos de definici�n, formulaci�n y ejecuci�n de las pol�ticas forestales en la Regi�n, en algunos casos dentro del marco de los programas forestales nacionales.

28. La deforestaci�n y sus causas siguen siendo uno de los principales temas en el debate forestal. En la mayor�a de los pa�ses a�n existe presi�n por tierras para la agricultura y la ganader�a, lo cual constituye una importante causa de deforestaci�n. Por lo general, las pol�ticas agropecuarias, mineras, y de asentamiento, m�s las pol�ticas generales de desarrollo, predominan sobre las pol�ticas forestales o no consideran el impacto que sus decisiones tienen sobre el sector forestal.

29. La degradaci�n de los bosques tambi�n constituye un tema importante en la Regi�n. Las causas principales de este problema es la explotaci�n forestal sin la aplicaci�n de normas adecuadas de manejo. Conocimientos sobre estos principios y m�todos est�n disponibles muchas veces, sin embargo, no son aplicados, supervisados y controlados por las respectivas autoridades; la explotaci�n ilegal es un problema en la mayor�a de los pa�ses. Tambi�n tiene un efecto en la degradaci�n de los bosques las concesiones de corto plazo empleadas por algunos pa�ses. Incluso existen concesiones anuales, donde no es posible esperar que se apliquen criterios de manejo forestal sostenible.

30. La toma de conciencia y la necesidad de la ordenaci�n territorial adecuada es un tema que ha ido ganando importancia en muchos pa�ses de la Regi�n. La falta de ordenamiento territorial se se�ala a menudo entre las principales causas de la deforestaci�n y degradaci�n de los bosques. A pesar de esta preocupaci�n son pocos los pa�ses que han legislado o est�n en proceso de legislar en este sentido.

31. Uno de los elementos claves para el desarrollo de pol�ticas sectoriales es el conocimiento de la extensi�n y condici�n de los recursos forestales nacionales. Varios pa�ses de la Regi�n han realizado o est�n realizando inventarios forestales nacionales, poseen programas nacionales de monitoreo de la cubierta forestal, de catastros forestales, o incluyen el tema de la evaluaci�n de los recursos entre los elementos considerados en las pol�ticas forestales. Tal es el caso de Argentina, Brasil, Chile y Colombia, que han realizado inventarios recientes de sus recursos forestales o poseen Sistemas de Informaci�n Geogr�ficos (SIG) y/o programas de monitoreo forestal bien establecidos.

INSTITUCIONES FORESTALES

32. Los pa�ses de la Regi�n se caracterizan por tener una gran cantidad de instituciones que se relacionan con los bosques y la actividad forestal. Esto, lejos de ser una ventaja, en muchos casos origina problemas que se manifiestan en descoordinaci�n, duplicaci�n de esfuerzos y aun en pol�ticas o acciones contradictorias. Ante �sto muchos pa�ses han analizado la situaci�n de sus instituciones con el fin de adaptarlas a las nuevas demandas impuestas por la sociedad en relaci�n con los bosques y sus funciones.

33. En muchos pa�ses la administraci�n forestal p�blica no tiene un nivel jer�rquico y pol�tico acorde con la importancia del sector forestal, ni tiene la capacidad para ejercer en forma eficiente las funciones que se les asignan. Ante esta situaci�n, numerosos pa�ses de la Regi�n han hecho modificaciones en la organizaci�n institucional del sector, traspasando la responsabilidad de los bosques nativos a las autoridades ambientales. Esta medida, por lo general, no ha dado soluci�n a los problemas e incluso en algunos pa�ses se se�ala que este cambio ha tra�do como consecuencia una p�rdida en la relevancia del tema forestal.

34. Algunos pa�ses se�alan la necesidad de crear instituciones que agrupen las actividades del sector forestal o de darle los niveles, en la estructura gubernamental, acorde con la importancia del sector.

35. La descentralizaci�n de las instituciones forestales es otro tema que cobra importancia en la discusi�n en muchos pa�ses de la Regi�n. La existencia de sistemas de gobierno y administraci�n forestal sumamente centralizados se identifica como uno de los factores que dificulta el desarrollo forestal. Gran parte de los recursos se asigna en los niveles centrales, en desmedro del desarrollo de las capacidades a niveles regionales o provinciales.

ASPECTOS ECONOMICOS DEL USO DE LOS BOSQUES

36. Seg�n el informe FAO, Situaci�n de los Bosques del Mundo. 1999 la producci�n total de madera en la Regi�n de Am�rica Latina y el Caribe es de 394 millones de m�, lo que representa el 11,8% del consumo mundial de madera. De este consumo, el 64.5% (254 millones de m�) corresponden a le�a y carb�n, el resto se emplea con fines industriales. El consumo de le�a y carb�n en Am�rica del Sur representa el 60% del consumo total, en tanto que en Am�rica Central, M�xico y el Caribe este alcanza al 85% del consumo total de madera.

37. A pesar de la enorme extensi�n de bosques y de las favorables condiciones para su crecimiento que presenta la Regi�n, el consumo de madera con fines industriales es bastante reducido y representa s�lo el 9.4% del consumo mundial. La producci�n de madera aserrada representa un 7.6%; paneles de madera 4.6%; pasta de celulosa 5.8% y papeles y cartones 4.4%. Gran parte de la producci�n industrial se concentra en Am�rica del Sur.

38. En Am�rica del Sur, con la excepci�n de Brasil y Chile, y en Am�rica Central, exceptuando Guatemala y Honduras, la contribuci�n del sector forestal al PIB de los pa�ses es poco significativa. A pesar de ello, los bosques juegan un importante papel social y ambiental que no queda reflejado en las cuentas nacionales. Es importante que los pa�ses reflejen en sus cuentas nacionales los bienes y servicios provenientes de los bosques (le�a, carb�n, frutos, protecci�n, recreaci�n y otros), con el fin de establecer el aporte real de los bosques a las econom�as nacionales.

39. En la Regi�n, con la excepci�n de Brasil, Chile y m�s recientemente Uruguay, las actividades forestales est�n fundamentalmente orientadas hacia los mercados internos. El futuro desarrollo del sector debe ir aparejado con la apertura de nuevos mercados y con pol�ticas que faciliten e incrementen la acci�n del sector privado, que se reconoce como elemento fundamental de desarrollo forestal.

ASPECTOS SOCIALES DEL USO DE LOS BOSQUES

40. La Regi�n est� experimentando un cambio positivo en cuanto a la percepci�n de la sociedad sobre la importancia de los bosques, no s�lo desde el punto de vista econ�mico, sino que tambi�n desde una perspectiva ambiental y social.

41. En muchos pa�ses de la Regi�n surge la preocupaci�n por los servicios generados por los bosques. Siguiendo el ejemplo de Costa Rica, pa�s que primero modific� su legislaci�n para incluir los servicios ambientales, varios pa�ses de la Regi�n est�n considerando la inclusi�n de este tema en sus pol�ticas y legislaci�n.

42. Una manifestaci�n de la preocupaci�n de la sociedad por el medio ambiente y en particular por los bosques, es la existencia de un gran n�mero de instituciones no gubernamentales preocupadas del tema. Estas organizaciones desarrollan una decidida acci�n a favor de los bosques, tratando de influir en las pol�ticas y legislaci�n que regula el uso, manejo y conservaci�n de los ecosistemas forestales y otras �reas naturales. En algunos pa�ses se han constituido en un elemento de oposici�n de los proyectos forestales de cierta envergadura.

43. Gran parte de los pa�ses de la Regi�n cuenta con mecanismos destinados a incrementar la participaci�n de la sociedad civil en las decisiones sobre pol�tica y legislaci�n relacionada con el manejo y uso de los recursos forestales. En pa�ses tales como Brasil, Colombia y Per�, destaca la preocupaci�n por incorporar en forma m�s efectiva a las comunidades ind�genas en los procesos de decisi�n sobre pol�ticas, programas y proyectos forestales.

ASPECTOS AMBIENTALES DEL USO DE LOS BOSQUES

44. La importancia ambiental de los bosques es bien reconocida en todos los pa�ses de la Regi�n. Esto se refleja en los cambios estructurales en las organizaciones gubernamentales, en la orientaci�n de las pol�ticas y en una mayor participaci�n de la sociedad civil en los temas relacionados con la conservaci�n y manejo de los bosques.

45. La Regi�n cuenta con un total de 230 millones de hect�reas de �reas protegidas. En total, las �reas protegidas representan el 11% de la superficie de la Regi�n. Varios pa�ses destacan por el alto porcentaje de su territorio destinado a la conservaci�n. Entre ellos se puede mencionar a Costa Rica (25.8%), Chile (18.7%), Guatemala (19.6%) y Panam� (29%).

46. En muchos pa�ses de la Regi�n las �reas protegidas presentan serias deficiencias en su manejo. Los pa�ses no destinan, por diversas razones, los recursos suficientes para su debida protecci�n y administraci�n. Esto se refleja en la carencia de planes de manejo, la tala ilegal de bosques te�ricamente protegidos, la ocupaci�n ilegal de tierras dentro de parques y reservas nacionales, captura ilegal de fauna silvestre y la ocurrencia de incendios intencionales.

47. Los incendios forestales han constituido uno de los principales problemas ambientales en el per�odo 1998-99. La presencia de la Corriente del Ni�o, en 1998, produjo grandes sequ�as en Am�rica Central y Am�rica del Sur, favoreciendo la ocurrencia de devastadores incendios, que habr�an afectado cerca de 3.8 millones de hect�reas. Se debe se�alar que gran parte de estos incendios, y en el caso de algunos pa�ses casi la totalidad, son originados por la acci�n humana.

INVESTIGACION FORESTAL

48. Avanzar hacia el manejo sostenible de los bosques de la Regi�n, considerando todos los elementos que este concepto involucra, requerir� de un enorme esfuerzo en el campo de la investigaci�n, especialmente en temas relacionados con el funcionamiento de los complejos ecosistemas forestales en la Regi�n. El reforzamiento de la capacidad de investigaci�n forestal es una condici�n fundamental para avanzar hacia el manejo sostenible de los bosques de la Regi�n.

49. La investigaci�n forestal en la Regi�n es claramente deficitaria, especialmente en los temas relacionados con los bosques naturales. Esto se debe en gran parte a la falta de pol�ticas claras y expl�citas que reconozcan la importancia de los bosques y de la investigaci�n forestal, no s�lo como importantes elementos de desarrollo, sino que tambi�n como elementos fundamentales para el bienestar de la comunidad en general.

50. Muchos pa�ses reconocen la necesidad de hacer cambios en su institucionalidad forestal para corregir estas deficiencias. La mayor�a de los pa�ses de la Regi�n cuentan con numerosas instituciones vinculadas a la investigaci�n forestal, lo cual genera problemas de coordinaci�n y falta de colaboraci�n. Esta situaci�n conduce a la duplicaci�n de esfuerzos, a la existencia de instituciones d�biles y a la escasa posibilidad de desarrollar investigaci�n multidisciplinaria.

51. Gran parte de los pa�ses de la Regi�n ha concentrado sus esfuerzos de investigaci�n en materias relacionadas al establecimiento, manejo y utilizaci�n de plantaciones forestales, por lo general realizadas con especies introducidas. Esta situaci�n, si bien en varios pa�ses ha generado importantes beneficios, ha ido en desmedro de los bosques nativos, que han sido poco estudiados, alejando la posibilidad de un manejo sostenible.

52. En general, se estima que los pa�ses de la Regi�n no destinan suficientes recursos para la investigaci�n forestal. Los Gobiernos siguen siendo la principal fuente de recursos, pero hay una tendencia hacia la reducci�n de fondos destinados a la investigaci�n forestal en las instituciones estatales, en el entendido que el vac�o que estas dejan tendr�a que llenarlo el sector privado, cosa que no siempre sucede. Esto ha forzado a las instituciones a la comercializaci�n de la investigaci�n, v�a de financiamiento que es factible en la medida que la investigaci�n se oriente hacia aspectos productivos y de comercializaci�n. El manejo forestal sostenible, como hoy se define, va a demandar una revisi�n de las prioridades de la investigaci�n.

53. El financiamiento a trav�s de fondos concursables es un mecanismo que se ha ido incrementando en varios pa�ses de la Regi�n. Este mecanismo, que presenta ventajas ya que permite una buena selecci�n de proyectos y abre importantes v�as de colaboraci�n con el sector privado, genera serios problemas en la estabilidad de las instituciones de investigaci�n forestal, que no disponen de presupuestos permanentes que les permitan mantener grupos de investigaci�n estables y de alto nivel ni investigaciones de largo plazo, fundamentales en la actividad forestal. La participaci�n del sector privado en el financiamiento de investigaci�n forestal en general sigue siendo limitada, a�n cuando en ciertos pa�ses, por ejemplo Brasil, el aporte es considerable.

54. La cooperaci�n internacional ha jugado un papel importante en la investigaci�n forestal en la Regi�n. A futuro �sta deber�a verse incrementada, ya que la extensi�n y complejidad de los ecosistemas forestales presentes en la Regi�n imponen un desaf�o que claramente supera la capacidad t�cnica y econ�mica de la mayor�a de los pa�ses. Sin la cooperaci�n de los pa�ses desarrollados y organizaciones internacionales, el avance hacia el manejo sostenible de los bosques en muchos de los pa�ses de la Regi�n se visualiza como una meta muy lejana.

CONCLUSIONES PARA DISCUSION

55. La deforestaci�n sigue siendo uno de los principales problemas que enfrenta la Regi�n en el �mbito del manejo de los recursos naturales. De los informes nacionales no es posible obtener antecedentes suficientes para determinar cu�l es la tendencia de esta situaci�n. Los resultados del programa Evaluaci�n de los Recursos Forestales del Mundo (FRA 2000) que realiza la FAO, y que ser� publicada a fines del a�o 2000, ser� fundamental para conocer la situaci�n real de los bosques en Am�rica Latina y el Caribe.

56. Los pa�ses deben hacer un esfuerzo por mejorar la informaci�n sobre los bosques y la actividad forestal en general, ya que constituye la base para la inversi�n y el desarrollo del sector y para el establecimiento de programas eficientes de conservaci�n.

57. La mayor�a de los pa�ses menciona el manejo de los bosques naturales como uno de los principales temas en sus agendas de pol�tica forestal, sin embargo, existe insuficiente informaci�n en cuanto a la extensi�n de los bosques naturales que realmente se maneja en forma sostenible en cada pa�s. La informaci�n existente tiende a revelar que el manejo de los bosques naturales se limita a�n a reducidas extensiones. Uno de logros m�s importantes para los pr�ximos a�os en materia de informaci�n forestal, ser�a la determinaci�n, en forma realista, de la aplicaci�n de los conceptos de manejo forestal sostenible en los bosques de la Regi�n.

58. La certificaci�n forestal est� tomando mayor importancia en los pa�ses de la Regi�n. Las empresas forestales est�n tomando conciencia de la necesidad de certificar el manejo de sus bosques para mantener una posici�n competitiva en los mercados mundiales. Si bien es un proceso que avanza con lentitud, es digno de destacar que en los �ltimos a�os se han certificado de acuerdo a los criterios de FSC cerca de 1.6 millones de hect�reas.

59. Los bosques secundarios constituyen un recurso importante en muchos pa�ses de la Regi�n. Los pa�ses deben intensificar su investigaci�n en torno a este tipo de bosques, ya que por lo general presentan altas tasas de crecimiento y ofrecen una interesante oportunidad desde el punto de vista del manejo forestal.

60. En cuanto a las plantaciones forestales, en general no ha habido grandes cambios en los �ltimos dos a�os. Argentina y Uruguay contin�an con un importante desarrollo en el �rea de las plantaciones forestales, en tanto que Chile, que junto a Brasil hab�a liderado esta actividad en los �ltimos 20 a�os, continu� declinando en sus tasas de forestaci�n. M�xico ha iniciado un importante programa de forestaci�n.

61. La mayor�a de los pa�ses ha dise�ado mecanismos para permitir una mayor participaci�n de la sociedad civil en el desarrollo e implementaci�n de sus pol�ticas y legislaci�n forestal. Esta tendencia, sin duda positiva, a�n no produce cambios sustantivos al momento de implementar las pol�ticas o poner en pr�ctica las leyes. Sin duda que no basta s�lo la participaci�n para hacer pol�ticas o leyes exitosas.

62. En relaci�n con el tema de las pol�ticas forestales, es importante que los pa�ses las hagan expl�citas, ya que ello permite un mayor compromiso del sector forestal y de la sociedad en general en torno a su cumplimiento. Los pa�ses deber�an destacar aquellas pol�ticas que han tenido un mayor impacto social.

63. Durante los �ltimos a�os, muchos pa�ses de la Regi�n han realizado cambios en las instituciones que se relacionan con la conservaci�n y manejo de los bosques. Hasta el momento y de acuerdo a la informaci�n recibida, el efecto de estos cambios es variable en cuanto a mejorar la gesti�n gubernamental relacionada al manejo de los bosques. En algunos pa�ses se se�ala que estos cambios, lejos de favorecer al sector lo han relegado a una segunda posici�n, bajo los niveles de decisi�n de pol�ticas.

64. En la mayor�a de los pa�ses de la Regi�n la actividad forestal est� orientada hacia el consumo interno. Se han hecho escasos esfuerzos por abrir nuevos mercados para los productos forestales madereros y no madereros provenientes de los bosques naturales, por lo que el aporte del sector forestal al PIB de los pa�ses es poco significativo. El consumo de le�a y carb�n sigue siendo el principal destino de la madera en la Regi�n.

65. Muchos de los pa�ses de la Regi�n han participado activamente en procesos para determinar Criterios e Indicadores de Manejo Sostenible de los Bosques y en el Foro Intergubernamental de Bosques de las Naciones Unidas. A pesar de ello, no existe un avance sustantivo en la aplicaci�n de dichos criterios a nivel nacional ni en la implementaci�n de los acuerdos de las Naciones Unidas.

66. Los pa�ses de la Regi�n han declarado extensas �reas de bosques y otras �reas silvestres como parte de sus sistemas de �reas protegidas. Dichas �reas presentan serias deficiencias en su manejo. Los pa�ses deben destinar mayores recursos para una efectiva protecci�n y manejo de sus parques y reservas nacionales, y evaluar qu� porcentaje de las mismas pueden realmente considerarse �reas protegidas.

67. Los incendios forestales constituyen uno de los principales problemas ambientales que afectan a la Regi�n. Considerando que la principal causa de ocurrencia es la acci�n humana, los pa�ses deber�an destinar m�s recursos a la creaci�n de conciencia y a programas orientados a la predicci�n, prevenci�n y control.

68. Es importante lograr la participaci�n del sector privado en la investigaci�n forestal, que a la fecha se da s�lo en los pa�ses con mayor desarrollo de su sector forestal. Adem�s, gran parte de la investigaci�n forestal realizada en la Regi�n se ha orientado a las plantaciones forestales, en desmedro del conocimiento de los bosques naturales. Un avance efectivo hacia el manejo forestal sostenible de los bosques naturales requerir� de una decidida acci�n de los pa�ses para reforzar la investigaci�n en esta �rea.